En 2023, nos lanzamos en un viaje interestelar que nos llevó a horizontes inesperados y también a profundizar en galaxias conocidas.
Fortalecimos nuestro trabajo en las industrias extractivas, enfocándonos sobre todo en la transición energética y abogando porque ésta sea justa y no repita patrones dañinos para las personas y el ambiente. Exploramos las consecuencias de la industria farmacéutica en el derecho humano a la salud durante la pandemia y expusimos sus patrones de captura del Estado. Contamos historias, develando el rol del sector privado en abusos a los derechos humanos, sin perder nunca de vista el rostro y las voces de las personas afectadas.
Continuamos caminando junto a las comunidades del Río Sonora en su larga lucha por la justicia y reparación integral, y con las compañeras de la Sierra Norte de Puebla en la consolidación del Colectivo Regional en Defensa de los Bosques y el Territorio. Navegamos colectivamente por cielos agitados para incidir en México y a nivel internacional en el desarrollo de políticas públicas y de instrumentos regulatorios que protejan los derechos humanos en el contexto de la actividad empresarial.
Nos paramos con orgullo frente a la lluvia de meteoritos de la ultraderecha que avanza en nuestra región.
Denunciamos con voz fuerte las vulneraciones a las mujeres, las personas LGBTI+, las comunidades racializadas e históricamente excluidas.
Nos hicimos preguntas, seguimos trabajando para buscar respuestas.
Nos abrazamos para celebrar algunas victorias y continuamos poniendo todo nuestro esfuerzo y compromiso en hacer de este universo un espacio mejor, más incluyente de todas las personas, más democrático y donde la rendición de cuentas del sector público y privado se convierta en una realidad.
Agradecemos a las comunidades que nos permiten caminar a su lado, a las aliadas de sociedad civil por el trabajo compartido y a las donantes que confían en el diseño de esta compleja nave espacial que somos y en el impacto que estamos generando.
Y gracias a quienes nos leen, difunden nuestro trabajo, utilizan nuestras herramientas, nos retroalimentan y se unen a esta travesía.
Les invitamos a internarse con nosotres en este repaso por el viaje de PODER en 2023.
Fernanda y Elena.
Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER) somos una organización de la sociedad civil, regional y sin fines de lucro, fundada en 2010.
Buscamos fomentar la transparencia y rendición de cuentas de las empresas en América Latina, desde una perspectiva de derechos humanos, género e interseccionalidad; así como fortalecer a personas, comunidades y organizaciones de la sociedad civil afectadas por prácticas empresariales, con el fin de que actúen como garantes de la rendición de cuentas a largo plazo.
Centramos nuestro análisis en el reconocimiento de las relaciones de poder desiguales en la toma de decisiones políticas y económicas que afectan a las sociedades latinoamericanas en su conjunto.
Nuestra misión es exponer y desentrañar la captura del Estado por parte de las corporaciones, mediante la cual las élites políticas y económicas controlan las decisiones de política económica nacional para su propio beneficio, limitando o excluyendo al resto de la sociedad.
Centramos nuestro trabajo en industrias no deslocalizables, como la minería y combustibles fósiles, infraestructura, transporte, manufactura pesada, sector financiero y, más recientemente, en la industria farmacéutica. Creemos que es allí donde las corporaciones tienen los impactos más generalizados sobre los derechos humanos, las comunidades y sus medios de vida, y donde los esfuerzos de reparación y remediación pueden conducir a un cambio sistémico.
en industrias clave para exponer patrones de abusos de derechos humanos por parte de las empresas, cerrar brechas en el acceso a la información y apoyar estrategias de rendición de cuentas y justicia para las comunidades afectadas por actividades corporativas.
a nivel nacional, regional e internacional, con tomadores de decisiones, inversionistas, comunidades y organizaciones para mejorar y establecer la normativa y regulación de respeto a los derechos humanos y su garantía por parte de las empresas y el Estado; facilitar la participación de la sociedad civil, el acceso a la justicia y reparación cuando hay daños; y prevenir futuros impactos negativos.
con comunidades afectadas por prácticas corporativas nocivas, con el objetivo de promover el fortalecimiento de sus capacidades para la defensa de sus derechos para que sean agentes de cambio a largo plazo.
con mensajes estratégicos que aumenten la conciencia pública sobre el impacto de las prácticas corporativas y que movilicen al público objetivo para que las empresas y los gobiernos rindan cuentas.
